La sexualidad humana es un universo vasto, diverso y profundamente personal. En su interior, el BDSM (acrónimo de Bondage, Disciplina, Dominación, Sumisión, Sadismo y Masoquismo) representa no solo una serie de prácticas sexuales alternativas, sino también una forma de conexión íntima, emocional y psicológica que muchas personas exploran para satisfacer